La historia, dice el saber popular, está escrita por los Vencedores; pero yo me pregunto ¿No será el aparente ganador presa de una cruel ilusión?
El que aquí queda, vive la vida y sufre sus inclemencias. El que marcha se dirige alegremente hacia la luz eterna.
Ahora, ¡Dime tú, amigo mío! ¿Quién es el vencedor y quién es el vencido?
Debajo de la tierra que pisamos,
viaja implacablemente el sutil magma que mueve las placas tectónicas de que está formada la corteza.
¿Acaso sea más real la tierra que pisamos que el fuego que no vemos?
Hay otra historia que los eruditos desconocen, y que como el magma de nuestro planeta se ha movido, se mueve y lo seguirá haciendo, por siglos, entre bastidores.
M uchos Hermanos se habrán preguntado o lo están haciendo en este mismo instante: si tan sólo existe una Rosacruz, ¿Por qué existen multitud de Organismos que detentan tal título y se proclaman unidepositarios del Saber Tradicional? Y también: ¿Por qué se autodenominan con el mismo título y sin embargo sus doctrinas son tan dispares?.
Una cosa es cierta, amados hermanos, algún día nacerá el que llegue a unificar en un sólo cuerpo a todas las Organizaciones Rosicrucianas tras algún concilio, congreso u otros, donde la tolerancia y el sincretismo más auténtico tengan cabida. La verdad sea dicha, y conociendo interiormente, como las conocemos, a las tres más importantes Fraternidades, podemos decir sin equívoco posible, que las diferencias son prácticamente nulas y sólo varían en la forma; a pesar de que cada uno de los cuerpos doctrinales dirige su mensaje a unas determinadas personas y que se encuentran en muy diferentes niveles de progreso.
Cuando alguna escuela utiliza, por ejemplo, en sentido Cristiano los términos, Cuerpo, Alma y Espíritu se refiere con el Cuerpo al vehículo material, el Alma sería el cuerpo simbiótico que uniese la materia al Espíritu y que permite el hecho de la vida y el movimiento tal y como lo conocemos; siendo el mencionado espíritu, la parte Eterna, que lo envuelve todo y que emana en su pureza del propio Creador. Esto puede producir confusión, cuando la Orden originaria de California y cuya sede actual se encuentra en Quebec utiliza los términos griegos, antiguos, del manuscrito de Nodín y coloca al Alma por encima de todo equiparándolo al Espíritu Cristiano, siendo aquí, el cuerpo, igualmente la materia y convirtiendo al Espíritu en parte del Éter, ya estudiado, que lo compenetra todo; siendo el Nous la Fuerza Creativa Universal y cuya bipolaridad hace posible la existencia del los electrones, átomos y moléculas.
Como podremos ir comprobando, las únicas diferencias que existen entre las distintas escuelas es una simple cuestión de terminología; habiendo, el que suscribe, utilizado la que le resulta más fácil, por un lado, y por otro el considerar que es más inteligible para el común de los estudiantes acostumbrados a la terminología cristianizada.
La Escuela Internacional de la Rosacruz de Oro, sita en Harlem (Holanda), dogmatiza, sin embargo, las enseñanzas Gnósticas, Steinernianas, Taoistas e incluso Budhistas, realizando un sincretismo memorable y sin duda alguna certero, no obstante.
La Orden Espiritual existe, más que gracias..., a pesar de todos los grupos que ostentan,de un modo u otro, el Sagrado Nombre de la Rosacruz, ya que sus enseñanzas provienen, aunque distorsionadas, directamente del Mundo Celestial, porque en el camino, éstas, se subdividen al entrar en contacto con la esfera reflectora del Universo material y cuya esencia está constituida de Éter Reflector y partículas de la triple Región Inferior del Mundo del Deseo, que a continuación pasaremos a ver. De la diversidad de esta Esfera Reflectora, es de donde las diversas instituciones se inspiran y alimentan, no de Shambala; pero las organizaciones mueren en el instante en que dejan de sintonizar con la frecuencia de ésta y se desvían de los auténticos objetivos de la Sagrada Institución Shambálica. Adquiriendo la adecuada resonancia, aparecen en su lugar nuevas instituciones o personas que ocupan su sitio, quedando las anteriores, en el mejor de los casos, como cadáveres que se van disolviendo con el tiempo. Estas personas, que suelen organizar nuevas agrupaciones, o no, son conocidas como Iluminatis o Iluminados cuya función seguirá siendo el transmitir la fuerza avatárica con renovada fuerza y vigor.
Nuestros objetivos irán siempre encaminados a intentar conseguir, dentro de la más exquisita tolerancia, la unidad de objetivos primordiales que se encuentran dispersos, al presente, en las diversas Ordenes, Fraternidades, Escuelas o Eclessias Rosicrucianas.
Todo estudiante, debería saber que algunas instituciones Rosicrucianas utilizan su energía en elevar la parte más material del Ser Humano y es por ello, quizá, por lo que han puesto un precio, no elevado, a su pertenencia que no a las enseñanzas; pues hay ciertos individuos que rechazan las cosas de valde pues consideran que éstas no tienen valor alguno. Otras dirigen sus esfuerzos a aquellos Amigos que habiéndose desprendido , de algún modo, de sus energías materiales no puede acceder a determinadas enseñanzas, elevadas, como no sea por la Gracia y Bondad de los donativos de algunas almas generosas. Asimismo, las enseñanzas son ligeramente diferentes a las impartidas por la Orden; pues al contrario que la primera, esta encamina sus esfuerzos a la futura consecución del Cuerpo Alma.
El tercer nivel lo encontramos en aquellos que se han constituido en Religión y atrae a todas aquellas personas gregarias que han descubierto que se encuentran atrapados en la cárcel de la materia. Hacen todo lo posible para intentar romper las cadenas que les atan a ella y pretenden conseguir el máximo de fuerza posible con la Unidad del Grupo. El Mensaje de estas Ordenes de Melkisedec, donde sus miembros se consideran reyes y sacerdotes va dirigido principalmente al espíritu de sus miembros para que intenten construir, entre todos, la Escalera de Jacob que les lleve, tras conseguir el Grial, Piedra Filosofal, Dorado Vestido de Bodas, Vellocino de Oro o Cuerpo del Alma hasta Shambala, la morada preparada por sus hermanos no caídos más allá de la Esfera Reflectora y perteneciente ya al mundo de la "Mente", que comunica directamente con el Mundo Original de los Adán Celestes.
Habiendo dado nuestra humilde opinión del porqué de la existencia de tantas organizaciones Rosicrucianas, que algún día deberán formar un solo cuerpo ya que sus diferencias son tan solo aparentes y están condenadas a entenderse para construir la profecía sembrada en el siglo XV por el olvidado y mítico Christian Rosentkreutz, pasaremos a estudiar, someramente, la constitución y Naturaleza del conocido como Mundo del Deseo.
Como indicamos en el capítulo anterior, el Mundo del Deseo está intrínsecamente compenetrado con el mundo físico como el agua que empapa una esponja, y en él, aunque invisibles para nuestros ojos, habitan una ingente cantidad de Seres. El Mundo del Deseo ocupa exactamente el mismo espacio que los planos de manifestación y lo único que los separa es su diferente frecuencia vibratoria. Se le denomina de tal forma, porque es en él donde toman consistencia o forma todas las sensaciones necesarias para permitir la pervivencia de las especies y de la propia evolución de estas.
De las siete regiones que forman el Mundo del Deseo, la Región de la Pasión y del Deseo Sexual hace posible que el Espíritu pueda unir su vehículo corporal con otros de diferente polaridad para, como hemos dicho, perpetuar la especie y así poder mantener indefinidamente vehículos de manifestación que permitan a los espíritus encarnados el adquirir sus experiencias evolutivas.
La Región de la Impresionabilidad es aquella que permite que el espíritu pueda ser consciente de todas las sensaciones captadas por los órganos periféricos del cuerpo material y a los que conocemos como sentidos. Sin la existencia de esta Región no existirían las impresiones y el espíritu sería incapaz de captar y posteriormente almacenar la información de los Reinos Inferiores tanto Etéricos como Químicos.
La Región de los Deseos, propiamente dicho, es aquella que aún no perteneciendo al Mundo del Deseo Sexual o de Procreación, hace posible la existencia, ya que de esta región surge la Vitalidad necesaria para la defensa de la Especie.
El Hombre, con la sola procreación, no tiene garantizada la continuidad indefinida de sus cuerpos, como tampoco la tuvieron los extintos dinosaurios del Jurásico. El Ser Humano, ante cualquier contingencia adversa o amenaza crea armas para su defensa tanto individual como colectiva. Si hiciéramos caso de los mensajes que nos transmite nuestro espíritu, por mediación de esta región, habríamos conquistado el espacio y colonizado otros planetas, así como habríamos llevado baterías de poderosas armas termonucleares a una órbita de Lagrange, alrededor de nuestro planeta, para desviar que no destruir la trayectoria de colisión de cualquier posible asteroide o cometa que amenazara la vida en la tierra como ya lo hizo en los mencionados tiempos en que habitaron este suelo los Grandes Saurios. También haríamos todo lo posible para dejar de actuar con respecto a la tierra como si fuésemos irracionales virus que sólo persiguiesen su propia destrucción. Todo esto no sucederá mientras los Seres Humanos nos sigamos dejando caer en el polo negativo de esta Región donde moran el Egoísmo, la Ambición mal entendida, la Avaricia, etc..., que son las formas erróneas y aberrantes de un enfermo instinto de conservación.
La Región del Sentimiento es donde se elabora, nunca mejor dicho, todo aquello que debería diferenciar la divinidad del Ser Humano en relación con sus hermanos los animales. Estos últimos también tienen grados de sentimiento según sea su inteligencia y sería una majadería supina el negarlo; pero es el primer punto, donde el cariño, el Amor hacia todo lo existente y visible hace evolucionar, en positivo, al hombre en el camino hacia la consecución de ese cuerpo alma, ya tan nombrado. De hecho, la mayor parte de ese Traje de Bodas Espiritual estará compuesto de partículas materiales, traspolando, del Mundo del Deseo y mientras más elevadas, en vibración, sean dichas partículas tanto más luminosa será la Piedra Filosofal que permita al Hombre vivir conscientemente en los planos más elevados.
En la Región de la Vida Anímica, como su nombre indica, es donde se forma la estructura del Alma que ocupa cada cuerpo humano. Esta vida del Alma es tan efímera, quizá algo menos pues pervive durante cierto tiempo después de la muerte, como el cuerpo físico que abandona en el momento de la transición; pero será , si nuestro desarrollo es el adecuado en las dos regiones siguientes, la herramienta fundamental en la consecución del Alma inmortal.
En la Región de la Luz Anímica es donde se construye la consciencia del Alma, sin la cual sería imposible, en la vida actual, recordar los sueños y en la vida futura el que dicho Cuerpo-Alma pudiera tener experiencias en su propio plano de manifestación.
La región del poder Anímico es la causante de la fuerza de voluntad que mueve al hombre a través de los designios demarcados por su espíritu, y a ella son debidas todas aquellas manifestaciones del Alma como el valor y los efectos extraordinarios que el común de los mortales acepta como milagros.
Tanto los sentimientos como los deseos y las emociones están sometidos como todo en la creación, a dos fuerzas, y que actúan de forma naturalmente opuesta en las regiones más densas y cercanas al plano físico así como en las tres regiones que se encuentran ligadas al Mundo Mental. Estas fuerzas son conocidas como de Atracción y Repulsión.
Es debido a las fuerzas de Atracción, el que todos los errores terminen cayendo sobre los individuos de vida disoluta así como las mayores bendiciones se apegan a aquellas personas que mantienen una vida moral y ordenada; por el contrario, las fuerzas de Repulsión evitan la contaminación de elementos vibratorios elevados por otros de consistencia más densa, consiguiendo de este modo, que los diferentes planos que los componen no se interfieran entre sí. Este sería el motivo del porqué un músico que se convierte en alcohólico o drogadicto, con el tiempo, termina convirtiéndose en un desastre abandonado por las musas.¡La excepción confirma la regla?
El Iniciado es capaz de utilizar esta fuerza inteligentemente para alejar de sí todos los errores que se le acerquen.
La tendencia natural, dentro de este Mundo, es atraer hacia uno mismo, toda aquella esencia de naturaleza semejante. Todo lo contrario que en el plano físico, donde sabemos que el magnetismo o electricidad del mismo signo produce repulsión en sus iguales y al contrario se atraen.
Conociendo las leyes que interactuan dentro del plano de los deseos, somos conscientes de que la mentira es un arma terrible, destructiva e irracional, que tendrá sus efectos más devastadores en dicho plano; pero que con el tiempo, incidirá tanto en las dimensiones más elevadas como en el propio cuerpo denso. Si de una cosa cierta creamos otra falsa, al pertenecer las dos al mismo acontecimiento serán atraídas entre sí, y como las versiones son antagónicas se destruirán mutuamente, ya que sus vibraciones son opuestas. Sería como intentar unir una partícula de materia a otra de antimateria; es por todo lo expuesto, que todo Iniciado formado en las Enseñanzas Rosacruces huye, en lo posible, de cualquier tipo de mentira por piadosa que pudiese parecer.
Ahora se comprende que cualquier acción realizada en el mundo del plano físico es reflejada, con mayor o menor grado en los otros planos vibratorios, siendo el Mundo del Deseo, consecuentemente por ser el más cercano, donde más efecto tiene; es decir, todo lo existente en el plano físico tiene su forma en sustancia de deseos en dicho plano. De otro modo: toda acción, organización o desarrollo tiene sus consecuencias paralelas en ese Mundo.
De lo antedicho se desprende que, la Orden Rosacruz y su influencia Gnóstica nos envía, desde los planos del Espíritu, la metanoia o frecuencia vibratoria avatárica que puede hacer posible la recreación de nuestro Órgano perdido o Grial; pero por otro lado, las organizaciones físicas que recogen el reflejo dividido, cual si de un prisma se tratara, de la Esfera Reflectora y se ponen en marcha, crean un negativo o positivo en el Mundo de Deseos y eso constituye un importante peligro para toda la humanidad a la hora de encontrar el camino de regreso a casa. Por ello, simbólicamente, la Orden desperdiga a sus miembros por todo el mundo para curar ese mal, reuniéndose tan sólo una vez al año en el Templo del Santo Espíritu que se encuentra en todas partes y en ninguna. Agharta, la tierra del Preste Juan, Shambala, Sángrila, etc...
De esto deducimos que las escuelas que se han organizado entorno a la Esfera Reflectora, tan sólo sirven para despertar a una consciencia superior a sus estudiantes; pero este, individualizando, el estudiante, si quiere conseguir la luz deberá desprenderse más tarde o más temprano de ese cascarón que le ata indefectiblemente a los planos más densos de la materia.
La única Rosacruz, verdadera, que existe es espiritual y sus miembros son valientes caballeros que toman el Cielo por asalto. El error consiste en creer que una escuela o eclessia puede llevar a sus miembros, cual ganado, a las puertas del cielo. Esto es un trabajo de cada uno; pero no hay que caer en el error de aferrarse a lo que consideramos el Bien cuando descubrimos día a día que en lo más profundo de lo considerado como mal siempre se encuentra alguna partícula, por pequeña que sea, de bien, y que alimentándola adecuadamente se multiplicará transmutando ese aparente mal en la resplandeciente Belleza del Bien engrandecido y evolucionado. Habremos transformado el pesado, grosero y venenoso plomo, en el más puro, curativo y fino de los oros.
Los Rosacruces conocen como purgatorio a las tres regiones más densas del Mundo del Deseo, siendo el primer lugar que visita el átomo simiente o chispa de espíritu del Hombre una vez que abandona su organismo etérico-químico tras la transición o muerte, como la conoce el Mundo Profano. Aquí la Chispa de Espíritu, por las leyes de atracción y repulsión, es limpiada o se auto-limpia de todas aquellas impurezas, cargas pesadas y groseras que le impiden elevar el Vuelo que le permita continuar su viaje hacia los planos superiores que son conocidos como el Primer Cielo. Esa eliminación o purga es la que le da el nombre a ese conjunto de regiones o planos.
Las tres regiones inferiores son pesadas por el íntimo contacto que poseen con el Mundo Físico ya que como hemos dicho repetidamente, son las que suministran las sustancias para las formas que constituyen tanto la experiencia como el crecimiento anímico y la evolución.
Existe una zona muerta intermedia o fronteriza entre el denominado purgatorio y las tres regiones más elevadas que se conocen como el Primer Cielo y que está constituida por el Plano de los Sentimientos. Allí y dependiendo del apego que tengamos por las cosas de frecuencia inferior nos elevaremos o permaneceremos hasta que la limpieza sea total y la chispa o simiente divina pueda elevarse pura y majestuosamente hacia lugares más cercanos a su lugar de morada. Lógicamente, toda depuración produce sensaciones de uno o de otro tipo que serán directamente proporcionales a la naturaleza de ésta; es decir, el futuro estará condicionado siempre por el pasado. Aquí el interés humano en conseguir su elevación espiritual será fundamental para atraer hacia sí las frecuencias elevadas que le permitan la levitación simbólica hacia los Mundos del Alma y utilizará la indiferencia para alejar de su persona todo aquello que le impida esa elevación. Nunca mejor dicho que se debe de alimentar un auténtico afán para mejorar, al mismo tiempo que la mejor manera de luchar contra el mal es no luchar. Este es el camino del No Hacer que predica el Tao. De este modo debe explicarse dicha indiferencia.
Por los motivos expresados con anterioridad, cualquier Iniciado estará siempre en contra de la Pena de Muerte o de cualquier otra represión cimentada en la Venganza Social. Ante el Mal hay que aplicar la medicina de la Indiferencia bien entendida para intentar transmutarlo alimentando la chispa de Bien que posee en lo más profundo de su interior con la educación adecuada.
La influencia sobre la humanidad de las tres regiones superiores del Mundo del Deseo o Primer Cielo hacen posible la manifestación del Arte y el Altruismo o filantropía. Por su cercanía con el Mundo de la Mente, estos tres planos están separados de la esfera reflectora por la zona muerta mencionada y son el crisol donde el espíritu del Ave Fénix deberá resurgir de sus cenizas algún día.
Sólo unas palabras para terminar: Hemos escrito que existe, o mejor dicho, que no existe un Órgano que otrora si poseímos, y la falta de eso nos impide la elevación consciente en los planos de mayor vibración. Sólo el cuerpo denso es el vehículo que tenemos plenamente acabado, entre comillas. Este vehículo del Alma, era conocido por los Caballeros Medievales como Santo Grial, por los antiguos Griegos como Vellocino de Oro, por los Alquimistas como Piedra Filosofal y por los Rosacruces como Cuerpo-Alma o Dorado Vestido de Bodas.
La consecución de dicho elemento primordial sólo será posible despertando al Eterno Dormido y que todos llevamos dentro. Al Eterno se le conoce como chispa divina, espíritu simiente y capullo de rosa, una vez despertado, por el deseo hacia las cosas elevadas. Entonces deberemos alimentarlo para que se convierta en la Rosa con la leche del Bien, del Bien y del Bien.
Bien en el Pensar, Bien en el Sentir y Bien en el Obrar. Una vez que el niño Dios ha crecido, con el consentimiento de la personalidad vigente (ella deberá dejarse morir) surge el nuevo vehículo de manifestación, Cuerpo-Alma, Estrella Dorada de cinco puntas que posee un nuevo receptáculo que será ocupado por aquella personalidad que se dejó sacrificar. Es la consecución del Cuerpo Inmortal y Plenamente Consciente que da lugar al Hombre Nuevo, auténtico Adepto Rosacruz e Hijo de Dios.
Amados Hermanos, todos los demás podrán llamarse estudiantes, aprendices o acólitos, a lo sumo, de la Rosacruz; pero sólo el Hombre Nuevo es un Rosacruz.
Aralba