Primer Grado Primera Orden "Celador":
Testimonio de un Viejo Estudiante XI
Para hacer honor a la verdad, lo primero que hicimos cuando sentimos, de nuevo, la llamada al trabajo iniciático, fue intentarlo con el Lectorium Rosicrucianum o Escuela Internacional de la Rosacruz Aurea, antes Rosacruz de Oro.
Nunca llegamos a recibir una explicación plausible del por qué se cambió de Rosacruz de Oro a Rosacruz Aurea. Podemos especular sobre los motivos; pero no dejaría de ser otra cosa que pura especulación.
Las veces que intentamos regresar al Lectorium, creo recordar que esta última fue la tercera, tuvimos que comenzar desde el principio. el hecho de regresar fue debido a que pensaba que mis dos intentos anteriores habían sido infructuosos debido a mi culpa, por no encontrarme preparado o no dar la talla. Quizá yo estuviera equivocado y mis percepciones anteriores habían sido erróneas. Bien, no hay dos sin tres, pensaba.
Lo cierto es que, desde el principio, sigo pensando lo mismo, se trata de la Organización rosicruciana que más se ajusta, de todas las que conozco, y son unas cuantas, a los preceptos y doctrinas apuntadas en los manifiestos rosacruces del Siglo XVII.
Mis mejores momentos los he pasado en el Lectoriúm, tanto en el antiguo Templo de Madrid, cerca de Argüelles, como en el Centro de Conferencias, Mercurio, en Zaragoza.
Hace años, los simpatizantes podían acceder a un breve; pero ilustrativo Curso por Correspondencia, que conservo con su carpeta como si se tratase de Oro Puro.
Muchos de los estudiantes rosacruces que se han acercado a la Literatura del Lectorium me decían lo mismo "Es una Enseñanza compleja y difícil de entender" Para mí, era justo todo lo contrario, una enseñanza asequible y que vibraba en resonancia con mi propio Corazón. La Literatura de la Rosacruz Aurea me resultó siempre muy esclarecedora, además de estar magníficamente editada. A día de hoy, creo que he leído más del noventa por ciento de su literatura y conservo los libros como un gran tesoro.
El Lectorium Rosicrucianum, tras mi antigua experiencia evangélica, me resultaba extremadamente familiar por aquello de abrir el trono del Corazón a Cristo para darle acceso al Trono de la Cabeza y, desde allí, que gobernará nuestras vidas (El Proceso de Christificación). Me sentía, de verdad, como en casa. Como si hubiese encontrado una extraña conexión o eslabón entre las iglesias protestantes y la Rosacruz.
Otra de las cosas, quizá la más importante de todas, fue el acceso que me proporcionó a la Gnósis y a la Literatura gnóstica, tanto de Oriente como de Occidente, así como al Conocimiento Hermético egipcio de Hermes Trimegistos.
Otra de las cosas que me maravillaba de la Escuela de la Rosacruz Aurea, era su profunda sinceridad. Jamás encontré engaño alguno dentro de su Literatura; sobre todo cuando trataba de su origen histórico. Ellos, en ningún instante han inventado una genealogía histórica que los encadenara con los rosacruces del pasado; simplemente se reconocen, siento que lo son por motivos que comentaré más adelante, como los herederos espirituales, tras un loable y duro trabajo de investigación en el pasado de la Rosacruz, sus influencias y orígenes.
Ellos vienen, nunca lo han ocultado, de una excisión, primero, de la Rosicrucian Fellowship de Oceanside y que se produjo, por la sucesión dentro de la Fraternidad Rosacruz, a la muerte de su Fundador, el Señor Max Heindel; pero también por un profundo revisionismo de sus enseñanzas. Existe un pequeño tufillo, permitidme la expresión, que permite percibir sus orígenes; pero hasta ahí, dado que toda su Doctrina está mucho más elaborada y ajustada a nuestro Tiempo; pero dejando atrás muchas cuestiones que, para cualquier persona sensata, podrían entrar en los mundos de la fantasía y la Ficción.
Ese hermanarse con el Mundo de los supuestos cátaros o Albigenses, en realidad Valdenses, convertían al Lectorium Rosicrucianum en una Institución religiosa profundamente cristiana, hablando en relación al cristianismo primitivo, y gnóstico.
A mi modo de ver resulta una suerte de resurgimiento, tras un elaborado y profundo estudio de sus fundadores, de la Iglesia Gnóstica de una parte importante del Cristianismo Primitivo, el que se desarrolló en Alejandría y que tan influenciado estuviera por el movimiento Neoplatónico.
De hecho, los estudios más recientes vienen a demostrar que el Cristianismo habría surgido de una suerte de sincretismo entre la doctrina judía de los esenios y del hermetismo del Egipto de la época. Un retorno a las fuentes originales del Cristianismo, justo lo que buscaban los protestantes que dieran origen al Movimiento Rosacruz del Siglo XVII.
La belleza y austeridad de los templos de la Rosacruz Aurea eran algo que elevaba mi Espíritu más allá de lo explicable. Me sentía bien, me acompasaba con el entorno y sus enseñanzas eran lo más cercano posible, idéntico diría yo, a lo descubierto por mí mismo de lo que entendía que podría haber sido la verdadera Rosacruz.
Pero algo, como ya os comentará anteriormente, no llegó a cuajar. Mientras yo pagaba una cuota mensual no había problem alguno; pero pronto, tras ser investido por imposición de manos, de nuevo, como Estudiante Probatorio, el equivalente a Probacionista de la Fraternidad Rosacruz, se nos reunió a los nuevos probatoriis para indicarnos que se había abierto una Misión en algún lugar de África y que sería interesante el aportar ciertas cantidades económicas. ¡No, otra vez no!
En la anterior ocasión se nos había solicitado, de forma siempre indirecta, un monto económico extra por la Construcción del Centro de Conferencias de Zaragoza. No, no había equívoco alguno, de mi parte, era una estrategia financiera en toda regla.
En aquel momento podría haberme hecho el loco, no aportar nada y seguir adelante; pero por mis experiencias anteriores yo conocía lo que ello implicaba ¡quedaría estancado dentro de la Organización! sería marcado con un asterisco y todo el mundo nos miraría como ese que no se integra en el Grupo y da más importancia a los temas económicos que a los espirituales.
No volvería a regresar al Lectorium, muy a pesar mío, hasta que unos años después, siendo Masón de la Gran Logia Simbólica Española, siendo invitado por Adrián Mac Liman, antiguo Gran Maestro, de la Gran Logia Española y Presidente de la (Sociedad Ibérica de Estudios Masónicos), no confundir con la Gran Logia de España, fuese invitado a dar una Conferencia conjunta acerca de las conexiones de la Masonería con la Rosacruz, en el Centro de Zaragoza. Una Conferencia que, por desidia y otras causas ajenas a este vuestro interlocutor, no pudo llevarse a cabo; pero eso es otra Historia que os contaré cuando trate el Tema de mi estancia en la Logia Amanecer 31 de la Gran Logia Simbólica de España. Ya no tardamos
Aralba Pensator Minister, Frater R+C